ÉXODO 130

Punto de mira El gemido de nuestra casa común Helena Caballero UNA PREOCUPACIÓN AMBIENTAL CRECIENTE En junio de 1972 se celebraba en Estocolmo una Con- ferencia de la ONU sobre el Medio Ambiente que cen- traba la atención internacional en la degradación am- biental y la contaminación transfronteriza. Esto último era muy importante, ya que señalaba el hecho de que la contaminación no reconoce límites políticos o geográfi- cos, afectando a los países más allá de su punto de ori- gen. Las conclusiones de la reflexión de los allí reunidos se llamó la Declaración de Estocolmo . Durante las décadas que siguieron, este concepto se amplió para abarcar temas medio ambientales de alcan- ce transnacional como la contaminación, el cambio cli- mático, la reducción de la capa de ozono, el uso de los océanos y los recursos de agua dulce, la deforestación, la desertificación, los vertidos peligrosos y la disminución de la diversidad biológica, reconociéndose que pueden te- ner graves repercusiones para la seguridad internacional, ya que socavan la base económica y la estructura social de los países pobres, exacerbando los conflictos sociales y provocando éxodos de refugiados. En 1987, aparece el Informe Brundtland, titulado “Nues- tro Futuro Común”, publicado por la Comisión Mundial para el Medio Ambiente y Desarrollo de las Naciones Uni- das. Este informe fue el primer documento que empleó el concepto “desarrollo sostenible”, definido como “el desa- rrollo que satisface las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer la posibilidad de las genera- ciones futuras de satisfacer sus propias necesidades”. En este contexto de preocupación creciente por el es- tado del medio ambiente, en mayo de 1992 se acuerda la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cam- bio Climático. El documento es un esfuerzo por definir y resolver el problema del cambio climático y del calenta- miento global, a nivel internacional. Un mes después, en junio de 1992 se adopta la De- claración de Rio de Janeiro, en la primera Conferencia de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y Desarro- llo, celebrada en Río de Janeiro, Brasil, conocida popular- mente como la Cumbre de la Tierra. La declaración rea- firmó y desarrolló la Declaración de Estocolmo, teniendo como objetivo principal alcanzar un desarrollo sosteni- ble, y produjo otros acuerdos importantes sobre deserti- 5 Exconsejera de Naciones Unidas en Agua y Medio Ambiente El cambio climático, la reducción de la capa de ozono, el uso de los océanos y los recursos de agua dulce, la deforestación, la desertificación, los vertidos peligrosos y la disminución de la diversidad biológica, pueden tener graves repercusiones para la seguridad internacional “Al observar la puesta del sol, noche tras noche, a través de la niebla sobre las aguas envenena- das de nuestra tierra natal, debemos preguntarnos seriamente si realmente queremos que algún futuro historiador del universo, en otro planeta, diga sobre nosotros: «Con toda su inteligencia y toda su habilidad, se quedaron sin previsión, sin aire, ni alimentos, ni agua y sin ideas”. U Thant, Secretario General, dirigiéndose a la 7ª Asamblea General, Nueva York, 1970. “La humanidad del período post-industrial quizás sea recordada como una de las más irres- ponsables de la historia”. Encíclica Laudato Si. Papa Francisco, Roma 2015

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